La economía española está en crisis. Lo saben desde hace tiempo los consumidores y las empresas, lo llevan diciendo desde hace meses los expertos, y lo reconoce ya el Gobierno.
El derrumbe del sector de la construcción (con la suspensión de pagos de Martinsa-Fadesa este verano como primera gran víctima), durante años el principal motor del crecimiento económico, es una de las causas más importantes, pero también lo son la crisis financiera global, los altos precios del petróleo y la dependencia energética, la alta inflación, un consumo disparado durante años, el elevado endeudamiento de las familias, un déficit exterior creciente, la falta de previsión política o la poca competitividad y productividad de muchas de nuestas empresas.
Éstas son diez claves para entender qué está pasando y por qué:
1. LOS BANCOS Y EL LADRILLO
En los últimos años, la economía española ha basado su crecimiento, además de en el turismo, fundamentalmente en el sector de la construcción.
Un mal síntoma
Desde el año 2000, y pese a que la economía general crecía a un ritmo espectacular (el 3,27% en 2004), la deuda de las familias con los bancos no ha parado de aumentar. Al mismo tiempo, la especulación con la vivienda se generaliza y, actualmente, el valor real de los pisos en España está inflado en un 30% de media.
Tipos, préstamos e hipotecas
A partir del año 2001, los tipos de interés, que determinan lo que pagamos por nuestra hipoteca, empiezan a mantenerse muy bajos. Ello, junto con el incipiente despegue del sector de la construcción, provoca en España un boom inmobiliario sin precedentes: los bancos ofrecen más y más créditos, la gente se hipoteca más y más.
Desde el año 2004, sin embargo, los tipos de interés van aumentando, y, por primera vez desde 2000, crecen los costes de financiación de los créditos (las hipotecas son más caras).
A ello se suma la subida generalizada del Euribor (el tipo oficial de referencia más utilizado para préstamos hipotecarios en España), que agobia a todos los que tienen su hipoteca a interés variable. En mayo pasado se situó en el 5,361%, con un incremento del 0,367% en sólo un mes.
Los préstamos no sólo son más caros, sino también más difíciles de conseguir. Pese a que, a diferencia del resto de Europa, la banca española ha ido batiendo un récord tras o otro de ingresos, ahora tiene menos dinero para prestar, o decide prestar menos, así que dan menos hipotecas. También tratan de conseguir más liquidez vendiendo participaciones y edificios, haciendo campañas para que metamos dinero…
Las condiciones para que nos den una hipoteca son, pues, cada vez más duras (los bancos contratan incluso a más expertos en perseguir a los morosos, que cada vez son más), sobre todo tras los desastrosos efectos que la política de créditos fáciles e inseguros provocó en EE UU el año pasado (y que se contagió a Europa, aunque no tanto a España), y en el marco de una crisis financiera a nivel mundial que en España se sufrió con especial intensidad debido, precisamente, al alto componente inmobiliario de nuestra actividad económica.
¿Qué pasó en EE UU?
Animados por el despegue inmobiliario, la buena marcha de la economía y los bajos tipos de interés, los bancos estadounidenses empezaron a prestar dinero (mucho dinero) a clientes poco seguros. Pero el mercado inmobiliario empezó a desplomarse y la vida empezó a ponerse más cara, con lo que muchos de estos clientes no podían pagar.
Los bancos empezaron a quedarse sin dinero para préstamos (los de EE UU y también los europeos, que a su vez habían prestado a los estadounidenses) y, al final, los bancos centrales de EE UU y de Europa tuvieron que inyectar liquidez (meter más dinero) en el sistema.
La crisis, además, sentó un precedente y derivó en una falta de confianza, haciendo a los bancos de todo el mundo (incluidos los españoles) más reticentes a la hora de conceder préstamos.
El colapso
De modo que las hipotecas están por las nubes y es difícil conseguirlas, los precios de los pisos están super inflados y, además, muchas familias albergan expectativas de que, si esperan, tarde o temprano los precios empezarán a bajar. El resultado es que en España la gente empieza a comprar menos viviendas.
A las inmobiliarias, por su parte, también les cuesta cada vez más conseguir préstamos bancarios para seguir construyendo y eso, unido al descenso de la demanda, hace que la construcción de casas se vaya ralentizando cada vez más.
Empiezan las suspensiones de pagos y las quiebras en el sector, algo especialmente grave, teniendo en cuenta que se trata de la locomotora del crecimiento económico español.
Además, como gran parte del empleo en estos últimos años lo ha generado la construcción, el parón del sector se ha traducido en un gran aumento del paro.
Los datos cantan
El importe medio de las hipotecas ha bajado hasta los 141.725 euros, pero las cuotas mensuales han subido: en el primer trimestre de este año estaban ya a 832 euros. Actualmente, los españoles están dedicando casi la mitad de todos sus ingresos brutos (el 46%) a pagar la hipoteca.
La venta de viviendas cayó un 31,8% en el primer trimestre.
Los pisos se han abaratado un 0,3% en el segundo trimestre del año, hasta los 2.095,7 euros por metro cuadrado. Los precios no bajaban desde 1998, antes de que empezara el boom inmobiliario. Seis de cada diez inmobiliarias asegura que ha bajado los precios para intentar reactivar la demanda.
En el segundo trimestre de este año se realizaron un total de 183.000 transacciones inmobiliarias, un 20% menos que en el mismo periodo del año pasado.
Según un informe de la consultora Grupo I, el número de viviendas inciadas a lo largo de este año será un 9,3% menor al año pasado, lo que causará la destrucción de 250.000 empleos.
Los primeros grandes afectados
El pasado día 7, la empresa constructora Martinsa-Fadesa , el mayor grupo promotor español por volumen de activos, presentó una suspensión de pagos tras haber generado una deuda de casi 6.000 millones de euros, incapaz de obtener créditos suficientes, y después de caer un 20% en Bolsa (como consecuencia, las acciones de las constructoras cayeron también en picado). Una semana después anunció 234 despidos (la cuarta parte de su plantilla). Otras 3.000 personas, pertenecientes a empresas subcontratadas, podrían verse también afectadas. La compañía se ha comprometido a entregar las más de 12.500 viviendas (valoradas en unos 2.060 millones de euros) que tiene pendientes.
La crisis no sólo afecta a las inmobiliarias y constructoras, sino también a todas las empresas relacionadas con la construcción. Sanitarios Roca, por ejemplo, anunció la supresión de 125 empleos, tras un primer aviso en el que amenazaba con 400 despidos. Tau Cerámica presentará un expediente de regulación de empleo que afectará a 110 empleados.
En el segundo trimestre del año el número de empleos destruidos en el sector de la construcción se multiplicó por cinco (un 380% más) con respecto al mismo periodo de 2007.
2. LOS PRECIOS
El petróleo
El precio del crudo ha subido más de un 60% en los últimos doce meses (por el crecimiento de la demanda mundial, por los especuladores del mercado, por las restricciones en la oferta de los países productores, por la debilidad del dólar, porque cada vez queda menos crudo, por la inestabilidad política internacional…).
Ello se ha traducido en un alza del coste de muchos de los productos más básicos, incluyendo la electricidad o los carburantes.
En junio la gasolina batió récords: 1,251 euros el litro (un 12,29% de subida desde enero), y el gasóleo (a 1,296 euros por litro, con un 20% de subida), se acercó a máximos históricos.
Los alimentos
Con subidas de entre el 23,13% y el 46,28% en algunos productos, el precio de los alimentos también se ha disparado. Las causas son complejas y, muchas de ellas, globales, empezado por el propio aumento del precio del petróleo (la energía para producir y procesar la comida), y pasando por otros muchos factores, desde el uso de biocombustibles (no hay consenso al respecto) hasta las sequías o el aumento mundial de la demanda, especialmente en India o China.
Desde 2005 los alimentos básicos han subido un 75% en todo el mundo.
Los datos cantan
El pasado mes de junio, la inflación (los precios) registró el peor dato de los últimos 13 años y superó la barrera psicológica del 5%. El vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, para quien esta crisis económica es «la más compleja que se ha vivido nunca», ya ha admitido que este año se situará en torno al 4%. Lo achaca al «brutal» encarecimiento del precio del petróleo.
Las familias pueden ahorrar cada vez menos: en el primer trimestre de 2008, el gasto de los hogares españoles creció a mayor ritmo (6,1%) que la renta disponible, y la tasa de ahorro se situó en sólo 2,60 euros de cada 100 disponibles, cuatro décimas menos con respecto al mismo periodo de 2007.
3. EL PARO Y LAS EMPRESAS
Vacas flacas
Uno de los principales efectos de la crisis es el aumento del desempleo, principalmente en el sector de la construcción (que es el que más trabajo ha venido generando), pero también en innumerables empresas, grandes y pequeñas, que, pese a que algunas están logrando capear el temporal mediante ingresos atípicos (venta de activos), se están viendo afectadas por la recesión general, la caída del consumo, el frenazo en el mercado publicitario, el aumento de los costes laborales, la falta de previsión, la crisis financiera, etc.
No sólo estamos consumiendo menos, sino que también tardamos más en pagar y pagamos más a crédito, lo que afecta asimismo a las cuentas de resultados de las empresas: el pasado mes de mayo, un 85% más de productos comerciales que en mayo de 2007 estaban en la cuenta de impagados, es decir, que habían sido comprados pero no pagados todavía.
Otra causa fundamental del aumento del paro es que se están creando menos empresas nuevas (un 33,1% menos el pasado mes de mayo que en mayo de 2007).
Los datos cantan
En junio, el paro, que no ha dejado de aumentar desde el mes de marzo, subió 36.849 personas, hasta los 2.390.424 desempleados. Era la primera vez que subía en un mes de junio desde 1993. En apenas tres meses, más de 88.000 personas han dejado de trabajar.
El Gobierno ya ha tenido que revisar al alza su previsión de la tasa del paro para el año que viene, asegurando que llegará al 11% (España será en 2009 el país de la OCDE con mayor tasa de paro, por encima de Turquía).
Según el avance del mercado laboral de julio elaborado por Analistas Financieros Internacionales (AFI) y la Asociación de Grandes Empresas de Trabajo Temporal (AGETT), en el tercer trimestre del año se destruirá empleo en España y la tasa de paro no se reducirá hasta 2011.
Algunos ejemplos
La compañía aérea Spanair ha anunciado esta misma semana que despedirá a 1.100 empleados y cancelará nueve rutas debido a la crisis del sector, causada por el aumento del precio del petróleo y la caída de la demanda (la aerolínea europea de tarifas bajas Ryanair, por su parte, cerrará temporalmente su base en Valencia a finales de este año).
También esta semana, la multinacional italiana Pirelli comunicó su intención de despedir a unos 280 trabajadores en su fábrica de Manresa, debido al «rápido deterioro de las condiciones macroeconómicas».
Imperial Tobacco presentó hace semanas un expediente de regulación de empleo que afectará a 226 trabajadores de la fábrica de Altadis en Cádiz.
La reducción de empleo está afectando a grandes multinacionales de todo el mundo, debido a la crisis de ventas. General Motors, por ejemplo, ya ha anunciado despidos para recortar sus costes hasta en un 20%.
4. EL DINERO PÚBLICO
Menos superávit
La crisis está mermando también las arcas públicas. En los cinco primeros meses de este año el superávit de las cuentas del Estado se ha reducido en un 80% respecto al mismo periodo de 2008. La recaudación de impuestos de IRPF ha subido un 9,8%, pero, debido a que cada vez consumimos menos, por el subidón de los precios, el IVA ha descendido un 17,8%.
También se ha recaudado menos en el Impuesto de Hidrocarburos (el que se aplica a los carburantes), ya que cada vez nos lo pensamos más a la hora de llenar el depósito.
Lo único que se ha salvado de la quema es la Seguridad Social , que, a pesar de la caída del empleo, ha mejorado en un 9% su balance positivo.
5. LA BOLSA
Mínimos
Gravemente afectada por la crisis inmobiliaria y por la situación de empresas como Martinsa-Fadesa, la bolsa española ha marcado varios mínimos anuales. El pasado martes perdió un 2,55% y en lo que va de año acumula pérdidas del 26,5%.
Las bolsas mundiales, debido sobre todo al precio del petróleo, no están en una situación mucho mejor. El pasado 26 de junio las europeas se dejaron entre un 2% y un 3% y Wall Street perdió un 3,03% hasta situarse en el nivel más bajo desde septiembre de 2006.
6. EL CRECIMIENTO ECONÓMICO GENERAL
Frenazo
Después de unos 14 años de crecimiento ininterrumpido, el parón económico (o, más exactamente, la desaceleración, porque no es que la economía española esté ‘decreciendo’, sino que está creciendo más lentamente) es un hecho.
Esta misma semana, el FMI, que ha cifrado en un billón de dólares el impacto de la crisis en EE UU, ha reducido en medio punto porcentual, hasta el 1,2%, su previsión de crecimiento para España el año que viene.
Solbes, por su parte, ha admitido que la desaceleración es «notable», que el «ajuste» (medidas de austeridad, despidos, recortes presupuestarios…) será «intenso» y que el crecimiento económico en 2008 estará por debajo del 2%. Las previsiones para 2009, dijo, son más bajas aún, aunque aseguró que empezaremos a repuntar a mediados de año.
Compramos más que vendemos
La balanza exterior tampoco va muy bien: hasta el pasado mes de abril tuvo un déficit de 40.720,1 millones de euros, lo que supone un aumento del 15,5% respecto al mismo periodo de 2007 (las importaciones crecieron más que las exportaciones). Además, se amplió el déficit energético.
Así, la economía española tuvo una necesidad de financiación de 38.260 millones de euros en el primer cuatrimestre, un 13% más que hace un año.
Pesimismo
Según el Eurobarómetro 2008 de primavera, España es el país de toda la UE donde los ciudadanos se muestran más pesimistas con respecto a su economía. Nos siguen los griegos, los portugueses y los belgas. De acuerdo con esta encuesta, después del terrorismo lo que más nos preocupa es, en este orden, el paro, la vivienda y la subida de precios.
Una encuesta reciente realizada para el diario El País reveló que para nueve de cada diez españoles la economía española «está en crisis», y que el 53% cree que la cosa irá a peor.
El índice de confianza de los consumidores cayó en 4,7 puntos durante el pasado mes de junio, instalándose en 51,7 puntos, su mínimo histórico, según datos del Instituto de Crédito Oficial (ICO).
Por lo pronto, la crisis ha frenado el número de reservas turísticas en el extranjero, y un 42% de los españoles estaría dispuesto a viajar fuera de temporada para poder ahorrar.
7. LA REACCIÓN DEL GOBIERNO
«Situación delicada»
Pese a la presión y los reproches de todos los partidos de la oposición, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero , se ha resistido a usar la palabra «crisis» (prefiriendo hablar de «situación difícil» y «situación delicada», o calificando de «opinable» el hecho de que exista crisis económica) hasta el pasado día 8, en que al fin utilizó el término en una entrevista en televisión .
También se ha negado a emplear la palabra Pedro Solbes, quien llegó a decir que «la gente exagera mucho cuando se habla de crisis».
Las medidas
Entre las iniciativas anunciadas o puestas ya en marcha por el Gobierno para hacer frente a la crisis económica se encuentran las siguientes:
- Deducción de 400 euros en el IRPF y supresión del Impuesto de Patrimonio.
- Adelanto de la devolución del IVA a las empresas (podrá solicitarse mensualmente en lugar de anualmente).
- Nuevos planes para favorecer las energías renovables y una ley de eficacia energética y energías renovables. Más inversión en Inversión y Desarrollo.
- Medidas para estimular el sector de la construcción, que recibirá una inyección adicional de 15.000 millones de euros en 2009 y en 2010.
- Nueva ley de arrendamientos urbanos para dar más garantías a los arrendadores de vivienda, confiando así en que aumente la oferta y bajen los precios de los alquileres.
- Impulso a las viviendas de protección oficial y menos impuestos sobre la rehabilitación.
- Medidas para aumentar, sin coste adicional, los plazos de las hipotecas de las familias más necesitadas.
- Reducción de las cargas administrativas sobre las empresas en un 30%.
- Más avales para la concesión de créditos a pequeñas y medianas empresas.
- Congelación de sueldos de los altos cargos del Gobierno (los de la Generalitat de Cataluña o el presidente regional de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, ya han anunciado que lo harán).
- Incremento del gasto corriente del Estado en sólo un 2%.
- Rebaja de la oferta de empleo público en un 30%, para contener el gasto.
- Aumento del salario mínimo de 600 a 800 euros.
8. LAS CRÍTICAS AL GOBIERNO
«Una broma»
El presidente del PP, Mariano Rajoy , que se ha mostrado partidario de políticas basadas en menos impuestos y en una mayor austeridad en las cuentas públicas y en todas las administraciones, calificó de «broma» las últimas medidas contra la crisis anunciadas por el presidente del Gobierno, y aseguró que el diagnóstico sobre la economía española realizado por Zapatero es «tardío, incompleto e ilusiorio». No obstante, ha ofrecido su ayuda al Ejecutivo para superar la situación.
Más flexibilidad
El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, ha reprochado al Gobierno que «no haya tomado medidas contra la inflación» e insiste en pedir más flexibilidad en los contratos de alquiler, moderación salarial y reducción de los márgenes comerciales.
9. ¿CRISIS?, ¿QUÉ CRISIS?
Grandes empresas
Para algunas grandes empresas españolas la crisis no parece ser un problema. Banesto, Unión Fenosa y Caja Madrid, por ejemplo, obtuvieron buenos resultados en el primer trimestre: Banesto ganó 449, 5 millones de euros, un 15% más que en el mismo periodo de 2007; Unión Fenosa, 652,3 millones, un 27,8% más; Caja Madrid, 1084, 52 millones, un 1,1% más.
La pega en el caso de las entidades bancarias es su elevada tasa de morosidad, que no deja de subir (un 0,79% más en el caso de Banesto; un 1,89% en el de Caja Madrid).
Millonarios
El número de personas ricas (aquellas que tienen activos financieros netos superiores al millón de dólares) creció el año pasado en España un 4%, tres puntos por encima de la media europea. En total son ya unos 164.000 particulares.
10. CÓMO LO VEN DESDE FUERA
La prensa internacional
Algunos titulares recientes sobre la crisis inmobiliaria y económica en España:
- Clarín (Argentina): «Inflación, temor al desempleo y deudas: La crisis económica preocupa a los sectores populares de España»”.
- The Economist (Reino Unido): «¿Crisis?, ¿qué crisis?» (en alusión a la resistencia del Gobierno español a emplear la palabra).
- The Daily Telegraph (Reino Unido): «España pierde brillo mientras la crisis se hace más profunda».
- The Times (Reino Unido): «Martinsa-Fadesa cae víctima de la crisis inmobiliaria en España».
- The Financial Times (Reino Unido): «El final de la burbuja inmobiliaria trae la recesión».
- The Globe And Mail (Canadá): «Martinsa-Fadesa, primera víctima de la crisis del mercado inmobiliario español».
- Le Monde (Francia): «La caída de la primera promotora del país sacude España».
- The Wall Street Journal (EE UU): «España sufre con el atasco de la vivienda».
- International Herald Tribune (EE UU): «La empresa que simbolizaba el boom inmobiliario español entra en suspensión de pagos».
- Der Spiegel (Alemania): «La crisis inmobiliaria amenaza a la economía española».
- La Repubblica (Italia): «La crisis inmobiliaria sacude España».