Barbie: cincuenta años en su propio mundo

Es la muñe­ca más pop­u­lar del mun­do, la más ven­di­da de la his­to­ria, la preferi­da de mil­lones de niñas y de no tan niñas, todo un icono de la cul­tura pop­u­lar. Su nom­bre no sólo es uni­ver­salmente cono­ci­do, sino que, además, define toda una estéti­ca femeni­na, y has­ta un sín­drome psicológico.

Mucho más que un juguete, ha sido fuente de libros y estu­dios, pro­tag­o­nista de sub­as­tas mil­lonar­ias y de pleitos no menos mil­lonar­ios, obje­to de colec­cionis­mo como pocos y de innu­mer­ables par­o­dias, y tam­bién el blan­co preferi­do de las críti­cas de quienes ven en ella uno de los may­ores sím­bo­los de todo con­tra lo que ha lucha­do y lucha el feminismo.

Bar­bie, la rubia de las medi­das imposi­bles, la muñe­ca que, para bien o para mal, ha con­ver­tido su pro­pio mun­do en el mun­do imag­i­nario de varias gen­era­ciones de niñas (ya lo decía el grupo Aqua en su famosa can­ción: I’m a Bar­bie girl, in a Bar­bie world –soy una chi­ca Bar­bie, en un mun­do Bar­bie–), cumple este lunes medio siglo de vida, y lo hace en mitad de una cri­sis económi­ca de la que no se ha libra­do ni ella (las ganan­cias de Mat­tel descendieron un 36,7% en 2008).

A sus cin­cuen­ta años no es que haya enve­je­ci­do, pero tam­poco es exac­ta­mente la mis­ma. Sus medi­das anatómi­cas son algo más reales, y sus ‘aspira­ciones’, algo más sofisti­cadas (la primera Bar­bie que habló decía «Quiero ir de com­pras», aho­ra la muñe­ca es has­ta emba­jado­ra de Unicef).

Esen­cial­mente, sin embar­go, Bar­bie se mantiene fiel a su espíritu y al obje­ti­vo de con­ser­var su trono en el reino de las muñe­cas. Hay casi una Bar­bie para cada raza del plan­e­ta y una para cada pro­fe­sión. Se pone velo si tiene que ponérse­lo y has­ta ha sido capaz de abrir su tien­da más grande del mun­do (la muñe­ca se com­er­cial­iza en 150 país­es) nada menos que en Shangai, que no será tan comu­nista como el resto de Chi­na, pero que aún sigue sien­do China.

La his­to­ria, las curiosi­dades, las críti­cas, las polémi­cas y los datos de la muñe­ca Bar­bie, en 35 claves, de la A a la Z.

A

1. Aniversario

La muñe­ca Bar­bie fue dada a cono­cer el 9 de mar­zo de 1959 en la Feria Inter­na­cional de Juguete de Nue­va York. Este lunes se cumple, pues, su 50 aniversario.

Pre­sen­ta­da como una apa­sion­a­da de la moda, la primera Bar­bie lucía una larga cabellera rubia peina­da muy al esti­lo de los años sesen­ta y un bañador con estam­pa­do de piel de cebra.

B

2. Bild Lilli

La muñe­ca fue crea­da por Ruth Han­dler, esta­dounidense de ori­gen pola­co, cuyo esposo era el dueño y co-fun­dador, jun­to con ella, de Mat­tel, una empre­sa ded­i­ca­da orig­i­nal­mente a pro­duc­tos del hogar.

Han­dler se había dado cuen­ta de que su hija prefer­ía jugar con muñe­cas de papel de for­ma adul­ta, en vez de con las muñe­cas de anatomía infan­til, que eran las úni­cas exis­tentes por entonces, y le pro­pu­so la a Mat­tel, que, ini­cial­mente, la rechazó.

Durante un via­je a Ale­ma­nia, sin embar­go, Ruth des­cubrió una muñe­ca lla­ma­da Bild Lil­li, que, pese a haber sido dis­eña­da orig­i­nal­mente como un obje­to sex­u­al para adul­tos, había lle­ga­do a ten­er mucha pop­u­lar­i­dad entre las niñas.

Esta vez sí, Mat­tel com­pró los dere­chos de la muñe­ca ale­m­ana y, tras el per­ti­nente cam­bio de ima­gen (muevas medi­das, elim­i­nación de los pezones), nació Barbie.

3. Barbara Millicent Roberts

El nom­bre com­ple­to de la muñe­ca (bau­ti­za­da en hon­or de la hija de Ruth, Bar­bara) es Bar­bara Mil­li­cent Roberts.

C

4. Claves del éxito

Además de su orig­i­nal­i­dad (la novedad de una muñe­ca con for­ma adul­ta), las claves del éxi­to de Bar­bie son muchas, y van des­de la proyec­ción en la mente infan­til de la ima­gen de un cier­to mod­e­lo de mujer atrac­ti­va e inde­pen­di­ente (aparente­mente «per­fec­ta») has­ta una exi­tosa estrate­gia com­er­cial fun­da­men­ta­da en el colec­cionis­mo y la diversidad.

Así, y man­te­nien­do su for­ma esen­cial, la muñe­ca tiene un sin­fín de imá­genes basadas en innu­mer­ables per­son­ajes o esti­los (Bar­bie maes­tra, Bar­bie vet­eri­nar­ia, Bar­bie enfer­mera, Bar­bie rock­era, Bar­bie embaraza­da, Bar­bie divor­ci­a­da, Bar­bie musul­mana, deportista, abo­ga­da, fotó­grafa, mod­e­lo, pin­to­ra, policía, prince­sa, tor­era, peri­odista… En total, más de un cen­te­nar), y acom­pañadas, a su vez, de sus cor­re­spon­di­entes, y tam­bién innu­mer­ables, acce­so­rios y com­ple­men­tos, incluyen­do 43 mas­co­tas difer­entes (per­ros, gatos, cabal­los, un loro, un chim­pancé, un cachor­ro de león…)

La muñe­ca, además, tiene mod­e­los que rep­re­sen­tan a casi todas las razas (Bar­bie blan­ca, negra, india, árabe, asiáti­ca…), a 35 nacional­i­dades (ital­iana, france­sa, chi­na, brasileña, israelí, mar­ro­quí, esquimal, japone­sa, hawa­iana…), y a todos los esti­los de la moda, des­de la clási­ca prince­sa de zap­atos rosa y lazo has­ta la Bar­bie ‘mod­er­na’ con vaque­ros o inclu­so vesti­da a lo punk. Fal­das largas o mini­fal­das, biki­ni o vesti­do de novia, pelo largo o corto…

Una Bar­bie, en defin­i­ti­va, para cada rol imaginable.

5. Coleccionismo

Todo ello ha hecho de Bar­bie uno de los obje­tos más colec­ciona­dos de todos los tiem­pos, espe­cial­mente des­de los años ochen­ta, cuan­do las primeras niñas que jugaron con la muñe­ca ya habían cre­ci­do, pero man­tenían su devo­ción por el juguete.

Con­sciente de ello, Mat­tel desar­rol­ló una línea exclu­si­va para colec­cionistas (Col­lec­tor Edi­tion), de la que se han fab­ri­ca­do unas 35.000 unidades.

El pasa­do mes de julio Mari­na Raebel, una colec­cionista británi­ca, sub­astó la que es con­sid­er­a­da como la may­or colec­ción de Bar­bi­es del mun­do. Reunidas des­de 1960 y en per­fec­to esta­do, tenía más de 4.000 muñe­cas. Se embol­só 165.597 euros con la venta.

Los colec­cionistas de Bar­bi­es tienen su propia jer­ga: A/O (All Orig­i­nal –todo orig­i­nal–), C‑1 a C‑10 (condi­ción en que se encuen­tra la muñe­ca, en una escala del 1 al 10), HTF (Hard To Find –difí­cil de encon­trar–), NRFB (Nev­er Removed From Box ‑nun­ca saca­da de la caja), OSS (Orig­i­nal Swim Suit –tra­je de baño original–)…

D

6. Diseñadores

A lo largo de su his­to­ria, Bar­bie ha sido vesti­da por algunos de los dis­eñadores más famosos y coti­za­dos del mun­do. El pasa­do mes de febrero, y con moti­vo de su 50 aniver­sario, la muñe­ca vivió uno de sus momen­tos cum­bre con un des­file en la pasarela de la Sem­ana de la Moda de Nue­va York, donde Bar­bie posó con mod­e­los dis­eña­dos por 50 modis­tos de alta cos­tu­ra, entre ellos, Ver­sace, Dior, Yves Saint Lau­rent, Pra­da, Nina Ric­ci, Car­oli­na Her­rera, Guy Laroche, Paco Rabanne, Oscar de la Renta, Armani, Calvin Klein, Guc­ci, Givenchy..

E

7. Entrevistas

Los dis­eños y com­ple­men­tos de Bar­bie no se eli­gen al azar. Según infor­mó el diario británi­co The Dai­ly Tele­graph, Mat­tel tiene un equipo de 30 pro­fe­sion­ales, dirigi­dos por un psicól­o­go, que entre­vis­tan a alrede­dor de 100.000 niños al año, pre­gun­tán­doles sobre sus pref­er­en­cias en músi­ca, comi­da, pro­gra­mas de tele­visión, el tiem­po que pasan con el ordenador…

F

8. Fiat

La empre­sa auto­movilís­ti­ca ital­iana tam­bién se ha suma­do a la cel­e­bración del 50 aniver­sario, y ha saca­do un mod­e­lo espe­cial del Fiat 400. El Fiat 500 Bar­bie es, por supuesto, rosa. Los asien­tos están tapiza­dos de rosa y blan­co, en la guan­tera hay bar­ras de labios y los espe­jos lle­van ilu­mi­nación espe­cial para poder maquil­larse a bordo.

G

9. Ganancias y crisis

Todo el glam­our y la fama de Bar­bie no la han libra­do de la cri­sis económi­ca . Según fuentes de la propia com­pañía, Mat­tel obtu­vo un ben­efi­cio neto de 379,6 mil­lones de dólares (298 mil­lones de euros) en 2008, lo que supone un descen­so del 36,7% con respec­to al ejer­ci­cio ante­ri­or (un 21% en el últi­mo trimestre).

Además, la juguetera sufrió una baja­da del 2% en las ven­tas en EE UU y del 1% en los mer­ca­dos internacionales.

«Nue­stro nego­cio no fue inmune al dete­ri­oro del entorno económi­co», admi­tió el pres­i­dente y con­se­jero del­e­ga­do de Mat­tel, Robert A. Eck­ert, quien apun­tó que la com­pañía se cen­trará en 2009 en reducir costes y gastos

H

10. Hermanas

Bar­bie tiene toda una famil­ia de muñe­cas. Sus her­manas (ningún her­mano) son Skip­per (des­de 1964), Tut­ti y Todd (1966), Sta­cie (1992) y Kel­ly (des­de 1995).

I

11. Islam radical

Bar­bie fue pro­hibi­da en Ara­bia Saudí por con­sid­er­ar las autori­dades de este país que se tra­ta de «un sím­bo­lo deca­dente de Occi­dente», y una muñe­ca con una «ves­ti­men­ta vergonzosa».

La respues­ta fue Ful­la, una muñe­ca more­na, de ojos oscuros y atavi­a­da con la ves­ti­men­ta más tradi­cional de las mujeres en el Ori­ente Medio musul­mán. Su creador comen­zó a com­er­cializarla en 2003 y des­de entonces se han ven­di­do dece­nas de miles de ejemplares.

Ful­la es extremada­mente pare­ci­da a Bar­bie, pero, bajo de sus ropas recatadas esconde un pecho mucho menos abul­ta­do que su ante­ceso­ra de Mattel.

En los anun­cios que se emiten por tele­visión, Ful­la se lev­an­ta al amanecer exclu­si­va­mente para cocer una tor­ta en el horno que regalar a un ami­go, reza y lee un libro antes de acostarse.

12. Indonesia

Una pequeña empre­sa de Indone­sia tam­bién com­er­cial­izó, con­sigu­ien­do un gran éxi­to, una muñe­ca que ha servi­do de alter­na­ti­va a Bar­bie para las niñas musulmanas.

La muñe­ca, que se lla­ma Salma, y tiene asimis­mo unos ras­gos y una figu­ra muy sim­i­lares a los de Bar­bie, aunque sus mod­e­los de ropa están basa­dos en la tradi­ción islámica

13. Irán

El año pasa­do, el fis­cal jefe de la Repúbli­ca Islámi­ca de Irán, Dori Nayafaba­di, ase­guró que «las importa­ciones de las muñe­cas Bar­bie y otros juguetes occi­den­tales ten­drán unas con­se­cuen­cias socio­cul­tur­ales destruc­ti­vas» para este país.

«La pro­pa­gan­da de juguetes como Bar­bie, Spi­der-Man, Super­man o Har­ry Pot­er, así como la importación no con­tro­la­da de dis­cos de músi­ca y jue­gos de vídeo debe sus­ci­tar la inqui­etud de todos los respon­s­ables de este país», dijo.

J

14. Jacqueline Kennedy

Uno de los prin­ci­pales cam­bios estéti­cos de la muñe­ca se pro­du­jo tras la lle­ga­da al poder en EE UU de J. F. Kennedy. Bar­bie imitó entonces el esti­lo que pop­u­lar­izó la esposa del pres­i­dente, Jacque­line.

No ha sido, en cualquier caso, el úni­co per­son­aje públi­co en el que se han fija­do los dis­eñadores de Mat­tel, y muchas cele­bri­dades tienen su Bar­bie cor­re­spon­di­ente, que imi­ta su esti­lo y su ves­tu­ario, des­de la reina Isabel II de Inglater­ra has­ta Eliz­a­beth Tay­lor, pasan­do por la can­ciller ale­m­ana, Angela Merkel.

K

15. Ken

En 1961, Mat­tel dotó a Bar­bie de un novio: el muñe­co Ken. De car­ac­terís­ti­cas sim­i­lares a las de la muñe­ca (mul­ti­tud de acce­so­rios, unas 40 pro­fe­siones disponibles), Ken man­tu­vo su his­to­ria de amor con Bar­bie has­ta que, en 2004, la empre­sa, en un inten­to pub­lic­i­tario de aumen­tar las ven­tas, anun­ció que la pare­ja se había sep­a­ra­do. No los volvió a ‘rec­on­cil­iar’ has­ta 2006, esta vez con un Ken basa­do en la ima­gen del actor Orlan­do Bloom y un aspec­to más duro y menos trasnochado.

L

16. Lesbiana

Mat­tel ha lucha­do siem­pre por per­se­ver­ar una ima­gen de Bar­bie de apari­en­cia mod­er­na pero fiel, en el fon­do, a val­ores bas­tante con­ser­vadores. Y si algo no se puede pon­er en duda, es la condi­ción sex­u­al de la muñeca.

En junio del año pasa­do, la empre­sa ame­nazó con denun­ciar a la artista brasileña Karin Schwarz, que había retrata­do a la pop­u­lar muñe­ca en acti­tudes lés­bi­cas en una serie de cuadros.

La empre­sa dijo que «Bar­bie es una dama muy cor­rec­ta y no le gus­ta que la retrat­en como algo que no es».

M

17. Made in Asia

Pese a ser uno de los grandes sím­bo­los de la indus­tria esta­dounidense, Bar­bie no se fab­ri­ca en Esta­dos Unidos, sino, des­de el prin­ci­pio, en fac­torías situ­adas en Asia, donde el coste de pro­duc­ción es menor. Empezó fab­ricán­dose en Japón y luego en Tai­wán, Indone­sia y China.

En 2007, un informe del Comité Nacional de Tra­ba­jo de EE UU denun­ció que en la fac­toría de la empre­sa en Shen­zen (Chi­na), los tra­ba­jadores eran oblig­a­dos a tra­ba­jar 15 horas al día, los siete días de la sem­ana, con un suel­do de 19 cen­tavos de dólar por cada Bar­bie man­u­fac­tura­da. Mat­tel alegó que la fábri­ca no oper­a­ba direc­ta­mente bajo su con­trol, sino con una licencia.

18. Medidas imposibles

En 1995, exper­tos en enfer­medades rela­cionadas con la ali­mentación del Inter­na­tion­al Jour­nal of Eat­ing Dis­or­ders cal­cu­laron que, proyec­ta­da a un tamaño humano, Bar­bie ten­dría unas medi­das de 38–18-34, y un grupo de inves­ti­gadores fin­lan­deses señaló que, con esa masa cor­po­ral, Bar­bie sería inca­paz de menstruar.

Otros estu­dios han puesto de man­i­fiesto que las pier­nas de la muñe­ca son un 50% más largas que sus bra­zos (en los seres humanos la difer­en­cia es de un 20%), lo que le impediría caminar.

Para pare­cerse a Bar­bie, una mujer media ten­dría que ser 0,6 met­ros más alta, quitarse 15 cen­tímet­ros de cin­tu­ra, añadir 12 a su pecho y 7 a su cuello.

No obstante, Mat­tel ha ido cam­bian­do poco a poco el aspec­to de Bar­bie, para hac­er frente a estas críti­cas y tam­bién para ir adap­tán­dose a los cam­bios en la moda. La muñe­ca actu­al luce algo más de tri­pa, sus labios están más per­fi­la­dos y tiene unas medi­das algo más verosímiles.

N

19. Nancy

La muñe­ca Nan­cy, de Famosa, fue la respues­ta españo­la a Bar­bie. Con una ima­gen algo más real que su com­peti­do­ra esta­dounidense, pero basa­da en el mis­mo con­cep­to, la Nan­cy, de la que se han ven­di­do aprox­i­mada­mente 25 mil­lones de copias, cele­bró en 2008 su 40 aniver­sario.

O

20. Oro, plata, platino, rosa

En 2004 Mat­tel creó un sis­tema de clasi­fi­cación para iden­ti­ficar las muñe­cas Bar­bie que podrían lle­gar a ser colec­cionables. Las Bar­bie Plati­no son fab­ri­cadas en can­ti­dades menores a 1.000 unidades; las Bar­bie Oro, en can­ti­dades menores de 25.000; de las Bar­bie Pla­ta se pro­ducen como máx­i­mo 50.000 unidades y las Bar­bie Rosa son artícu­los de colec­ción que no tienen una cuo­ta deter­mi­na­da de producción.

P

21. Pleitos

A Bar­bie no le han fal­ta­do com­peti­do­ras. El caso más famoso, aunque no el úni­co (los abo­ga­dos de Mat­tel pre­sen­tan una media de una deman­da al mes por pla­gio o para pro­te­ger las señas de iden­ti­dad de la mar­ca), fue prob­a­ble­mente, el de Bratz, de MGA Enter­tain­ment, una muñe­ca pare­ci­da a Bar­bie, aunque más cabezona, cuya com­pe­ten­cia hizo perder a Mat­tel mil­lones de dólares.

Bratz fue idea­da por el dis­eñador Carter Bryan cuan­do aún esta­ba en nómi­na de Mat­tel y su con­tra­to otor­ga­ba a la com­pañía la propiedad int­elec­tu­al de todos sus diseños.

Final­mente, un juz­ga­do dio la razón a Mat­tel y deter­minó que Bratz era una copia de Bar­bie, lo que obligó a MGA al pago de una ind­em­nización millonaria.

Los exper­tos cal­cu­lan que Bratz gen­eró ben­efi­cios de has­ta 500 mil­lones de dólares (unos 315 mil­lones de euros) anuales para MGA des­de su lan­za­mien­to en 2001.

22. Precio

Una Bar­bie nor­mal cues­ta actual­mente en España entre 12 y 20 euros.

23. París

La fla­mante Ciu­dad de la Arqui­tec­tura y el Pat­ri­mo­nio, el nue­vo museo inau­gu­ra­do el pasa­do mes de sep­tiem­bre en en el Tro­cadero, a oril­las del Sena y a pocos met­ros de la torre Eif­fel, en París, ha sido dis­eña­da por diez arqui­tec­tas france­sas e incluye, con el patrocinio de Mat­tel, la lla­ma­da «Vil­la de Made­moi­selle B.». Se tra­ta de una casa a escala real para Bar­bie, en la que poder mostrar las ten­den­cias actuales en la arqui­tec­tura, con un acen­to espe­cial en el cuida­do del medio ambiente.

24. Peluqueros

En la plan­til­la actu­al de Mat­tel tra­ba­jan un total de doce pelu­queros y medio cen­te­nar de diseñadores.

24. Películas

Des­de 2001 Mat­tel ha real­iza­do numerosas pelícu­las con Bar­bie como pro­tag­o­nista. Entre ellas, Bar­bie y el cas­canue­ces, Bar­bie Rapun­zel, Bar­bie en el lago de los cisnes, El diario de Bar­bie, Bar­bie Fairy­topia y la magia del arco iris…

Q

25. Quejas y críticas

Pese a que Ruth Han­dler llegó a decir que Bar­bie enseña­ba a las niñas «las infini­tas posi­bil­i­dades de un ancho mun­do en el que podían ser lo que quisier­an: pro­fe­sion­ales, bue­nas ami­gas, altru­is­tas y por­ta­do­ras de una ele­gan­cia envidi­a­ble», la muñe­ca ha sido ampli­a­mente crit­i­ca­da, pre­cisa­mente, porque uno de sus may­ores atrac­tivos reside en que su vida no es posi­ble en la realidad.

Sus detrac­tores (entre ellos, el auto­de­nom­i­na­do Bar­bie Lib­er­a­tion Front –Frente de Lib­eración de las Bar­bi­es–) desta­can la supues­ta pre­sión que la ima­gen de la muñe­ca puede ejercer sobre las niñas en lo que respec­ta al aspec­to físi­co, a sus aspira­ciones sociales, a la asi­gnación de roles o al fomen­to del consumismo.

En este sen­ti­do, advierten del ries­go de que, en com­bi­nación con otros fac­tores, como la pub­li­ci­dad o el mal papel educa­ti­vo que puedan jugar los padres, ello pue­da desem­bo­car, en algunos casos, en trastornos ali­men­ti­cios como la anorex­ia o la bulimia.

Sus defen­sores insis­ten en que se tra­ta tan sólo de una muñe­ca, y que todo depende del uso que se de de ella. Enfa­ti­zan además los val­ores pos­i­tivos y de sol­i­dari­dad que, sobre todo en los últi­mos años, ha inten­ta­do transmitir.

R

26. Ruth Handler

La ‘madre’ de Bar­bie, Ruth Han­dler, fal­l­e­ció en Los Ánge­les, Cal­i­for­nia (EE UU) a los 85 años, en abril de 2002.

Su car­rera pro­fe­sion­al sufrió un duro golpe a finales de los años 70 cuan­do ella y su mari­do fueron forza­dos a salir de Mat­tel, la empre­sa que habían fun­da­do. En 1978, además, Han­dler fue acu­sa­da de come­ter fraude postal y con­de­na­da a realizar tra­ba­jos comunitarios.

Años después, le fue diag­nos­ti­ca­do un cáncer de mama y tuvo que some­terse a una mas­tec­tomía, tras lo cual comen­zó a realizar una cam­paña para lla­mar la aten­ción sobre la enfer­medad y fundó la empre­sa Near­ly Me (Casi yo), que creó un seno prostético.

S

27. Síndrome

El lla­ma­do colo­quial­mente «sín­drome de Bar­bie» con­siste en una dis­fun­ción de la per­son­al­i­dad por la cual la per­sona (prin­ci­pal­mente niñas y ado­les­centes) aspi­ra a con­seguir por cualquier medio unas pro­por­ciones físi­cas basadas en el tipo de mod­e­lo de la muñeca.

28. Shanghái

A sólo tres días de que la muñe­ca Bar­bie cele­bre sus 50 años, Mat­tel inau­guró este viernes en pleno cen­tro de Shanghái, la ciu­dad más cap­i­tal­ista de Chi­na, la tien­da más grande del mun­do ded­i­ca­da a la muñeca.

La tien­da con­tará con 250 emplea­d­os de cara al públi­co y otros 50 para tar­eas de oficina.

29. Subastas

El colec­cionis­mo ha hecho de Bar­bie una de las prin­ci­pales estrel­las de las sub­as­tas, tan­to tradi­cionales como online (es uno de los pro­duc­tos más sub­as­ta­dos en eBay, por ejem­p­lo), e incluyen­do casas tan pres­ti­giosas como Christie’s. En una sub­as­ta real­iza­da por esta casa en 2006, el pre­cio de sal­i­da de la Bar­bie más cara, la «Primera Bar­bie», se mar­có entre los 1.160 y los 1.740 euros.

T

30. Thomas Forsythe y las barbies desnudas

En diciem­bre de 2004, un tri­bunal de San Fran­cis­co (EE UU) sen­ten­ció que Bar­bie esta­ba «madu­ra para el comen­tario social» y rec­hazó una apelación de Mat­tel con la que pre­tendía impedir la sat­i­rización de la pop­u­lar muñe­ca.
Conc­re­ta­mente, el tri­bunal indicó que las imá­genes de los desnudos de bar­bi­es hechas por el artista Thomas Forsythe eran una par­o­dia, y que no suponían un per­juicio para la deman­da de pro­duc­tos Mattel.

Forsythe había real­iza­do fotos de Bar­bi­es desnudas en posi­ciones absur­das con var­ios uten­sil­ios de coci­na en una serie tit­u­la­da «Cade­na de Ali­men­to Barbie».

U

31. UNICEF

La Bar­bie del siglo XXI se vende como una mujer pre­ocu­pa­da por las causas sociales, los ani­males, el medio ambi­ente. En 1997 Bar­bie fue nom­bra­da emba­jado­ra de UNICEF y, des­de entonces, colab­o­ra en cam­pañas de pre­ven­ción del cáncer y la hepati­tis B, entre otras.

V

32. Verdú

El Museo de Juguetes y Autó­matas de Verdú (Llei­da) tam­bién se ha unido a las cel­e­bra­ciones por los 50 años de Bar­bie. Este fin de sem­ana, todos los vis­i­tantes que lleven una Bar­bie de cualquier época podrán entrar gratis.

33. Videojuegos

Los exper­tos con­sid­er­an que el papel cada vez may­or de los video­jue­gos en el ocio infan­til será el prin­ci­pal reto al que ten­drán que enfrentarse en un futuro próx­i­mo las empre­sas jugueteras tradi­cionales como Mat­tel. Por lo pron­to, Bar­bie está pre­sente en numerosos video­jue­gos, la may­oría de ellos basa­dos en las pelícu­las pro­tag­on­i­zadas por la muñeca.

W

34. Web

Bar­bie tiene su propia web ofi­cial: Barbie.com.

Z

35. Zapatos

Se cal­cu­la que por los pies de Bar­bie han pasa­do unos mil mil­lones de pares de zapatos.